
Una nariz electrónica para determinar la madurez del compost
Investigadores del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (Irnas-CSIC) y de la Universidad de Huelva han validado un dispositivo que relaciona el olor del material orgánico con los procesos químicos y biológicos que tienen lugar en el abono e indica si está en el punto óptimo para que no resulte tóxico en la […]

La herramienta que han utilizado los investigadores andaluces mide hasta diez olores distintos: “El proceso de compostaje emite cientos de gases con sus olores característicos que proporcionan información sobre el proceso de compostaje”, matiza el responsable del proyecto, Rafael López.
Hasta ahora, para determinar si un abono está maduro se aplican distintos procesos químicos, en los que se mide la relación entre el carbono y el nitrógeno, y biológicos, en base a ensayos de germinación de una planta, Lepidium.
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